¡Cada testimonio nos motiva a seguir comprometidos con el propósito de SNSI!
"Cuando me enteré que vamos a hacer SNSI en casa, me sentí emocionada, porque pensaba que no se iba a hacer nada. Antes de la pandemia estaba planeando con mi amiga todo lo que íbamos a hacer este año, ahora esperamos por nuestra caja de actividades para trabajar desde casa".
"Me gustó el campamento, hice los 4 años, fui desde los 9 hasta los 12 con mucho orgullo y quiero proponerme como voluntaria para el año que viene".
"Para mí (se) está haciendo un buen trabajo, porque a través de orientar a las niñas, las motivan a cuidarse, a formarse y les dan muchas orientaciones buenas (…)".
"Es bueno que compartan las actividades padres e hijos. Es una forma de conocerse más y de saber qué y cómo piensa tu niña, cuáles son sus inquietudes y sus miedos, qué la hace feliz".
"Una experiencia muy buena para todas las niñas y así ellas piensan las cosas mejor antes de hacerlas y se darán cuenta que son todavía muy pequeñas para atender a otro niño".
"Además de que somos personas importantes para la sociedad, tenemos derechos y tenemos que formarnos en valores".
"Para mí, parte del ADN del campamento es la creatividad, flexibilidad y adaptabilidad a las niñas, a sus emociones, a sus intereses, y necesidades. Este año [2020] nos vemos frente a una situación completamente distinta, pero sé que como trabajamos en equipo vamos a lograr acompañarlas en la distancia".
"Participar en Soy niña, soy importante me ha sorprendido, incluso superado mis expectativas. El programa ha sido tan completo, trabajamos en diferentes áreas, pero al final atacamos el mismo problema, que es la autoestima, la vida sexual de las niñas y que ellas crezcan sabiendo que son capaces de lograr lo que quieran".
"Uno de mis objetivos como voluntaria es empoderar a las niñas para que se esfuercen, para que tengan una autoestima saludable, que se quieran, que se amen, que se valoren, que se acepten como ellas mismas, para que así produzcamos juntas estas herramientas que necesitan para que mañana sean mujeres empoderadas".
"Pienso que es un tiempo que marca positivamente la vida de estas niñas, pues en este lugar no sólo van a jugar, realizar actividades divertidas, sino además es un espacio donde reciben amor, una buena instrucción, donde se sienten amadas, apreciadas y valoradas y realmente importantes".
"Nosotras (mis compañeras y yo) necesitamos el campamento, para navegar en la inocencia y recargarnos de amor, para ser mejores, para ser un modelo a seguir, para explotar esa burbuja que cargamos muchas veces".
"Esta experiencia me marcó de manera profunda. Entendí que tenemos el poder en nuestras manos como mujeres y la sociedad en general de amarnos. Entendí que si yo camino empoderada con mi piel oscura y pelo afro y rizado, ellas reflejándose en mí pueden hacer lo mismo".
"Lo que más disfruto es la sonrisa de cada princesa y ver cómo sus ojos brillan llenos de esperanza".
"Tener un proyecto de vida es una especie de carboncito que aviva el fuego, el propósito y la pasión de lograr algún objetivo, una profesión. Cuando apoyamos a una niña, que posteriormente será una mujer en la sociedad, estamos abriendo un canal para ayudar a su familia entera".